21 de noviembre de 2016

WILLIAM SHAKESPEARE, OTELO, EL MORO DE VENECIA


WILLIAM SHAKESPEARE 

OTELO, EL MORO DE VENECIA

Escrita hacia 1604 y probablemente representada el mismo año, esta tragedia en cinco actos, en verso y en prosa, de William Shakespeare se publicó en cuarto en 1622, en folio en 1623 y nuevamente en cuarto en 1630 y en 1655. 


El texto de la primera edición en cuarto presenta notables diferencias con la de 1623, hasta el extremo de que quedó justificada la hipótesis de que los editores utilizaron manuscritos distintos; por ello el texto se establece teniendo en cuenta ambas ediciones.


La fuente de esta obra es la séptima novela de la tercera década de los Hecatómitos de Giovanni Battista Giraldi Cintio, es la titulada Un capitán moro, la número 37 de las cien novelas que contiene esa recopilación.
Hay una diferencia en el texto de Giraldi, el capitán moro y el alférez carecen de nombre.


No se sabe con certeza si Shakespeare se valió del original italiano o bien de la traducción francesa de Gabriel Chappuys, publicada en París en 1584.




El palacio de Whitehall, donde Shakespeare estrenó Otelo, pintado por Hendrik Danckerts


A partir de aquel argumento, Shakespeare concibió una de sus mejores tragedias, Othello. The Moor of Venis,  para su compañía de teatro, “Los hombres del Rey”, que fue estrenada el 1 de noviembre de 1604 en la sala de banquetes del palacio de Whitehall, en presencia del rey Jacobo I de Inglaterra.
Retrato de Jacobo I, anónimo (c. 1604)


ARGUMENTO DE OTELO


La acción se desarrolla primero en Venecia, la célebre ciudad del norte de Italia, y después en la isla de Chipre, en el Mediterráneo oriental.

El moro Otelo, general al servicio de Venecia, ha conquistado el amor de Desdémona, hija del senador veneciano Brabancio, relatándole sus gestas y los peligros que ha corrido.
Otelo relatando sus aventuras a Desdémona 
por Robert Alexander Hillingford, 1869

Al inicio de la obra, Desdémona se acaba de fugar de casa de su padre, Brabancio, y Otelo se ha casado con ella. 

Por esto Brabancio acusa a Otelo ante el Dux de haber hechizado y raptado a su hija. 

Pero Otelo explica públicamente de qué manera conquistó lealmente el corazón de Desdémona, y ésta confirma su relato.


Mientras tanto llega la noticia de que es inminente un ataque de los turcos contra Chipre, y se pide la colaboración de Otelo para rechazarlos. 
Brabancio, de mala gana, cede su hija al moro al ver que Desdémona declara públicamente su amor por Otelo. 


Desdémona pide al Dux viajar junto a su marido. Se decide que así sea, pero Otelo sale de viaje de inmediato en su propio barco, dejando a su esposa al cuidado de Yago hasta que se produzca el encuentro en Chipre.

Yago aconseja al ingenuo Rodrigo que si quiere acabar disfrutando de Desdémona, se disfrace y le acompañe con todos a Chipre. Le conmina a llevar dinero y a vender sus tierras. 

Luego planea acusar a Casio ante Otelo de engañarlo con Desdémona




















Ya en Chipre, una tremenda tempestad hace naufragar a la flota turca, lo que termina con la confrontación. 
Van llegando a puerto los barcos de la expedición: el de Casio, el de Yago con su esposa Emilia y Desdémona; y por fin el de Otelo, que se reúne con su esposa.

El alférez Yago, que ha sido sustituido en el cargo de lugarteniente por Casio, siente un odio profundo hacia Otelo.
.
Yago esperaba ser ascendido por Otelo y además ha oído rumores de que el moro ha yacido con Emilia, su esposa y camarera de Desdémona.


En un primer momento, Yago logra desacreditar a Casio ante Otelo, haciendo que Casio se emborrache y turbe la paz pública. 
En ello le ayuda Rodrigo que, sin ser correspondido, ama a Desdémona. 

Casio, privado de su grado, es inducido por Yago para que ruegue a Desdémona que interceda en favor suyo ante Otelo.

Simultáneamente Yago hace nacer en el ánimo de Otelo la sospecha de que su esposa le engaña con el desgraciado lugarteniente...

Otelo y Desdémona pintados por Antonio Muñoz Degraín


El alma de Otelo es noble, violenta, solitaria y apasionada pero caerá irremediablemente en la telaraña que Yago irá tejiendo a su alrededor y que culminará con la escena del pañuelo, cuando el malvado oficial siembre la duda en el corazón del moro y logre convencerlo de que su mujer lo engaña con Casio.










A partir de ese momento, Otelo se hundirá en una espiral irreflexiva e incontrolable que sólo terminará cuando estrangule a Desdémona y sea consciente de que ha sido utilizado por el malvado  y traidor Yago.



Otelo y Desdémona por Alexandre-Marie Colin. 1829



TIERRA SANTA INTERPRETA OTELO CON IMÁGENES DE LA PELÍCULA DE  OLIVER PARKER:






SI QUIERES LEER OTELO DE WILLIAM SHAKESPEARE, AQUÍ PUEDES HACERLO:








EL SÍNDROME DE OTELO
  














El llamado “Síndrome de Otelo” es un buen ejemplo de la paranoia conyugal que, por desgracia, cuatrocientos años después de que Shakespeare escribiera este drama todavía se “representa” en demasiados hogares por culpa de la violencia de género. 

Un problema que, aunque siempre ha estado presente en nuestra sociedad, en los últimos años, ha alcanzado una indudable trascendencia jurídica, social y mediática.

Hasta 1871 no se dictó la primera sentencia que reconocía a una mujer derechos civiles y políticos iguales que su cónyuge.

Sólo en enero de 2006, en tan sólo un mes, murió una mujer en España cada tres días a manos se su propio “Otelo”.

Y en el año  2010 en España hubo 71 mujeres muertas víctimas de la violencia de género

Con esos datos, resulta más sencillo comprender la plena vigencia de esta obra cuatro siglos después de su primera representación.



OTELO EN LA ÓPERA


Dos siglos más tarde, dos músicos italianos volverían a dar vida a aquellos personajes en sendas óperas del mismo título: “Otello”, una de Gioacchino Rossini, estrenada en 1816, y otra de Giuseppe Verdi, de 1889. 




LORD BYRON, OTELO Y LA ÓPERA



EL Palazzo Mocenigo, Venecia, residencia de Lord Byron. 


Lord Byron, que por aquel entonces estaba de viaje por Italia, se preguntó: “¿Poner música al Othello de nuestro Shakespeare? ¿Cómo puede haber alguien capaz de semejante insensatez?”.


OTELO EN EL CINE

El cine, como no podría ser de otro modo, también ha realizado diversas versiones de este clásico entre las que destaca la versión de Orson Welles, de 1952.

También es muy interesante la de Kenneth Branagh, de 1995.







LOS CELOS COMO TEMA LITERARIO

Si el tema de los celos ha despertado su curiosidad por el lado oscuro del amor, también puedes encontrarlo reflejado en estas otras obras: El príncipe destronado de Miguel Delibes, El celoso extremeño de Miguel de  Cervantes o Fortunata y Jacinta de Benito Pérez Galdós.

EL PALACIO DE DESDÉMONA EN VENECIA

Está generalmente admitido que la infortunada Desdémona, esposa del celoso moro, pertenecía a la familia Contarini, y que habitaba el pequeño pero elegante palazzo Contarini Fasan, construido en 1475 en el estilo gótico flamboyante y situado en la orillas del Gran canal, frente a la Salute.

Palazzo Contarini Fasan en el Gran Canal, Venecia por Samuel Prout




Bibliografía: LOS MITOS DE "OTELO" Carlos Pérez Vaquero

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